
Hace más de 500 años,
los mexicas veían la muerte como un viaje
Un camino llamado Mictlán, lleno de pruebas, donde el alma no luchaba por gloria… sino por transformarse.
El oro no era riqueza. Era ofrenda al sol. Una recompensa interior.
Hoy, desde España y desde México, nace este guante como un acto de respeto y gratitud.
No como homenaje a un pasado conquistado. Sino como puente entre culturas… y entre almas que han luchado en silencio.
Este guante se llama Oro del Inframundo. Está hecho para quienes han estado en la sombra… y han vuelto con algo valioso.


Una pieza sagrada…
con cuerpo de precisión
Diseño concebido en España. Inspirado en el Mictlán y en la estética simbólica de la cultura mexica.
Fabricación hecha a mano en México, en un taller donde la artesanía es un legado. Cada costura está guiada por años de oficio. No es una reinterpretación moderna: es una conversación entre épocas.


Piel natural grabada
con símbolos prehispánicos
Acabados dorados aplicados con pigmento noble, sin excesos. La insignia plástica en relieve está cosida dentro de la muñequera: no adorna, pertenece.
Estructura acolchada compacta de corte mexicano clásico. Estabilidad, seguridad y firmeza en cada cierre. Diseñado para entrenamiento o sparring de nivel intermedio y avanzado.

Edición Serie limitada
Sólo en preventa.
Entrega estimada: septiembre 2025.
No garantizamos reposición.
Significado cultural
En la cultura mexica, el Mictlán era el inframundo. Un viaje del alma por nueve niveles de oscuridad. No era castigo. Era transformación.
Al final del camino, solo el alma que había soltado todo podía alcanzar el descanso.
El oro, llamado teocuitlatl, no era dinero. Era símbolo del sol. Era luz interior.
Este guante nace de esa historia. Y quiere honrarla como se honra un altar.

